De repente tomé el papel, comencé a escribir, ¿sobre qué? no lo sabía, miles de ideas, palabras y letras, volaban por mi cabeza.
Era ese grito abatido, ese algo que se queda en mi garganta… Soledad que frívola pasas y te quedas conmigo, me observas tan cerca y respiras mi aire.
Tu paz es mi estadía y tu presencia mi desesperación, tu realidad mi certeza del tiempo que tengo libre para mi, para planear meticulosamente cada movimiento, cada pensamiento, planear lo que soy y seré.
Te anhelo y te respiro, distante me siento y te observo y en mi contradicción espero...
¿Serás mía al fin, felicidad de soledad acompañada?
Llegará el día en que juntas solo en las noches, soledad tu y yo,
en un rincón oscuro recordemos nuestro tiempo.
Te extrañaré desde ahora, te extrañaré y te extrañara.
Era ese grito abatido, ese algo que se queda en mi garganta… Soledad que frívola pasas y te quedas conmigo, me observas tan cerca y respiras mi aire.
Tu paz es mi estadía y tu presencia mi desesperación, tu realidad mi certeza del tiempo que tengo libre para mi, para planear meticulosamente cada movimiento, cada pensamiento, planear lo que soy y seré.
Te anhelo y te respiro, distante me siento y te observo y en mi contradicción espero...
¿Serás mía al fin, felicidad de soledad acompañada?
Llegará el día en que juntas solo en las noches, soledad tu y yo,
en un rincón oscuro recordemos nuestro tiempo.
Te extrañaré desde ahora, te extrañaré y te extrañara.
1 comentario:
Es un placer leerte
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